jueves, 26 de noviembre de 2009
¿Qué son los Mantras?
El sonido tiene un poder profundo y es un hecho reconocido y natural que los sonidos estridentes perturban e irritan, mientras que los sonidos suaves tienen un efecto relajante y apaciguador. Por eso se consideran tan importantes a los mantra, como herramienta en nuestra evolución interior, pues aprendiendo a utilizarlos podemos descubrir un sinfín de posibilidades para mejorar nuestra relación con nosotros mismos y con los demás, tanto a nivel material como espiritual. Además son muy útiles para utilizar en los ejercicios de meditación y relajación profunda para elevar nuestros niveles de vibración a planos más altos y puros.
Mantra es una palabra sánscrita que se desglosa en dos concepciones: man – que es el correlato entre el pensamiento y la criatura pensante y tra que significa "instrumento". Así pues el Mantra es un instrumento de la mente que también nos puede ayudar a mantenernos en la calma, explorar nuestras capacidades mentales, evitar la depresión, … Esta herramienta tiene su origen en la India y surge por la necesidad de los yoguis a utilizar algún mecanismo como ayuda en la búsqueda de la realidad última o principio universal. Estos antiguos visionarios percibieron algunos sonidos en sus profundas meditaciones que pudieron observar que estaban en correspondencia con su nivel de meditación o energía. Se fundan así los mantra en palabras sánscritas en las que cada letra tiene un valor místico. De manera que son palabras de poder y pueden aportar beneficios al que las sabe utilizar. Existen numerosísimos mantras hallados en los textos sagrados de diversas culturas como la tibetana, védica, budista, hindú, etc., pero hay algunos más comunes o más utilizados como el famoso mantra Aum (Om).
Lo primero que hay que comprender es cómo se recita un mantra. Es cierto que es muy conveniente mantener la pronunciación de la palabra en sánscrito, pero lo más importante es que cuando se recitan se haga siendo conscientes del sonido y de su poder. Es decir, de nada sirve recitar de memoria sin prestar toda nuestra atención al sonido y a su vibración. Existen tres procesos de asimilación del mantra. El primero, en una etapa inicial de toma de contacto se recitan los mantra en voz alta. El segundo, en un momento más avanzado se recitan en voz baja. Y el tercero en un momento ya de dominio del mantra se recita mentalmente.
Se pueden recitar en cualquier lugar y en cualquier momento y son de especial ayuda para superar momentos de crisis como un examen o una entrevista de trabajo.
Los mantra también tienen sus herramientas complementarias para ayudar a que tengan un efecto mayor sobre el individuo. Para ello se suelen utilizar una serie de mudras, que son posiciones corporales adecuadas a cada mantra y yantras, que son los símbolos que cada mantra tiene.
EJERCICIOS CON MANTRAS
Para tomar contacto por primera vez con los mantra comenzaremos por poner en práctica una serie de ejercicios muy sencillos con el famoso mantra Om. Este mantra es el símbolo del sonido primordial y de la vibración originaria cósmica. Es la esencia vital que se encuentra en todo ser. Está organizado en tres partes más una cuarta que es la síntesis de las tres (a – u – m), y nos ayuda a sintonizar con nuestro centro divino y a equilibrar nuestras energías más adecuadamente, transmitiéndonos una sensación de paz y poder para realizar lo que sea.
A) Aprendiendo a respirar:
Es fundamental entender que para realizar correctamente los mantra hay que saber respirar. Generalmente el ser humano respira solo lo necesario para subsistir sin darse cuenta de que en la respiración se oculta una increíble fuerza vital que nos ayudaría a avanzar más rápido y a crecer con más facilidad; y ni que decir tiene que incluso nos evitaría muchas de las enfermedades a las que estamos acostumbrados a sufrir. Por ello hay que aprender a respirar con nuestros tres puntos principales: el abdomen, el tórax y la clavícula.
Así pues antes de poner a realizar un mantra practica diez respiraciones de cada uno de esos puntos. Si no sabes cómo hacerlo podrás comprobarlo de la siguiente manera:
* Para la respiración de abdomen sitúa tus manos sobre tu parte abdominal e intenta inflar la barriga como si tuvieras una pelota mediante la inspiración. Después mediante la espiración desinfla esa pelota lentamente.
* Para la respiración torácica sitúa tus manos sobre tu tórax en el pecho y mientras inspiras comprueba que la zona pulmonar se ensancha y sale hacia afuera y que mientras espiras vuelve a su posición original.
* Para la respiración clavicular posa tus manos sobre la clavícula un poco por encima de tu pecho y observa como al inspirar esa zona se sube y al espirar se baja.
B) Recitando el mantra Om:
Una vez que ya sepas respirar correctamente a través de tus tres puntos comenzarás a recitar el mantra Om de la siguiente manera:
* aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa……….. Toma aire en respiración abdominal y cuando vayas a espirar lentamente recitarás en voz alta la letra A hasta que se te acabe el aire. Pruébalo unas tres veces y si quieres puedes situar tus manos sobre el abdomen para comprobar la vibración.
* uuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu………… Toma aire en respiración torácica y cuando vayas a espirar lentamente recitarás en voz alta la letra U (casi como una O) hasta que se te acabe el aire. Pruébalo unas tres veces y si quieres puedes situar tus manos sobre el tórax para comprobar la vibración.
* mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm…………. Toma aire en respiración clavicular y cuando vayas a espirar lentamente recitarás en voz alta la letra M hasta que se te acabe el aire. Pruébalo unas tres veces y si quieres puedes situar tus manos en tu clavícula para comprobar la vibración.
No tienes por qué emitir un tono determinado, utiliza el que a ti te venga mejor.
C) Complementación con mudra y yantra:
Cuando ya tengas muy dominado el ejercicio anterior podrás realizar el manta Om con mayor rapidez haciendo las inspiraciones completas desde la abdominal hasta la clavicular y espirando a su vez lentamente desde la abdominal hasta la clavicular a la vez que recitas oooooooommmmmmmmmmmmmmmmmm………….
Para hacerlo más efectivo adopta la posición del loto con las manos en el centro, izquierda sobre derecha y las yemas de los dedos gordos tocándose o la misma posición del loto con las manos apoyadas en las rodillas formando un cuenco en el que se toquen las yemas de los dedos gordo e índice. De todas formas también puedes hacerlo en tu posición de meditación que quieras, e incluso sentado en una silla.
Soy Espiritual