lunes, 3 de diciembre de 2012
La Ignorancia es la Felicidad - Sintiendo a la Mátrix.
Este es un ejemplo supremo del poder de Mátrix, el Maya hindú, lo ilusorio, en versión tecnológica. Ejemplo de la confusión entre la realidad y nuestros sentimientos, emociones y deseos. Muestra certeramente, para quien tenga ojos para ver, cómo mediante la manipulación de sus emociones es posible convertir a un ser humano en una mera batería para el sistema, ajeno a la realidad, al Mundo Real.
Que la realidad refute el producto de tu actividad mental no es importante, lo vital es seguir sintiendo, seguir emocionándose, porque aunque el filete no sea real, hay un agente Smith que te está diciendo: ¡Es bueno y jugoso!. Y como ya sabemos que la predisposición condiciona la experiencia de la realidad, el resto de la historia es una multitud de adictos al soma, a la propaganda emocional, al vacío real.
En Mátrix se está más a gustito, porque no hay que responsabilizarse de uno mismo, es el Constructor y los diversos programadores quienes deciden por tí, lo que piensas, lo que sientes, lo que haces. Te dirigen a través de tus anhelos, de tus frustraciones, hacia una vida irreal.