jueves, 16 de junio de 2016


Mi Visión Personal sobre ser Terapeutas de MCV

Como persona que está en un camino de autoconocimiento es posible que no te diga nada nuevo.

Pero para mí el MCV junta un poco de técnica con mucho de vivencia personal, porque básicamente se busca guiar a la persona a un viaje de autoconocimiento, a re-valorar el poder que tienen, a recordar los viejos conceptos olvidados: sobre la enfermedad, la salud, sus miedos, su realidad, etc., pero sin renegar de su pasado ni de sus creencias, ya que ellas la pusieron aquí y ahora en las puertas de un nuevo mundo "olvidado".

¿Y como se hace?, partiendo de nosotros, teniendo presente el poder creador que poseemos, expandiendo nuestras percepciones, sanándonos a nosotros mismos, siendo coherentes y no tomándolo tan en serio, a la vida no hay que tomársela tan a pecho. Vinimos a jugar, a divertirnos y a aprender en el trayecto, o sea a ser felices. Y esa es la responsabilidad, como terapeutas, que tenemos. No podemos cambiar a una persona, pero si podemos transmitir esa alegría o por lo menos plantar una semillita en esa persona para que poco a poco vaya creciendo la idea del poder que todos tenemos de CREAR.

Desde el punto de vista técnico, el MCV se basa en el Biomagnetismo Médico (Par Biomagnético) creado por el Dr. Goiz y todos los principios, de la Mecánica Cuántica, que los físicos ya han demostrado y siguen experimentando (lo único constante es el cambio).
Somos un conjunto de moléculas andantes, y si vamos más profundo, somos un conjunto de átomos andando, y más profundo, somos energía, vibración, energía inteligente, información. Y vivimos inmersos en un campo, una mátrix o como quieras llamarla, en la que todos estamos conectados.

Como perdimos la conciencia de esta conexión, por nuestras vivencias, nuestra forma de pensar, las cosas que venimos cargando propias de nuestro entorno (familia, antepasados), en nuestro campo se van generando puntos o zonas de desconexión o de distorsión, que en la medida que no les prestamos nuestra atención se van mostrando en nuestro cuerpo físico.

Todo esto lo olvidamos, pensamos que es desconocido para nosotros, y como algo muy natural aparece el miedo a lo desconocido. Y empezamos a creer en otras cosas que lo único que logran es separarnos mucho más de nuestro estado natural.

Como terapeutas de MCV, buscamos reestablecer esa conexión, nada más, para que luego, naturalmente, cuerpo (posiblemente) mente y espíritu, tomen el control de su vida y a través de esto, sanen.

Siempre tenemos presente que la única diferencia entre una persona que viene a consultarnos y nosotros en la posición de terapeutas, es que fuimos capaces de abrir esa puerta antes y nos atrevimos a entrar y dar los primeros pasos en este nuevo mundo. Solamente eso.

Carlos Fabían Burgueño Rebufello

Muchas gracias a mis Profesores  Carlos Fabían Burgueño Rebufello, Martin Etchelar y Maria Eugenia Da Silva Bacelo



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